Desde que era muy pequeña, recuerdo a mi madre con el caballete venga a pintar... sobretodo en verano, cuando íbamos a la finca con los primos, y ella se ponía a pintar al aire libre.
A mi siempre me llamaba la atención, y me ponía con mis pinturas... las plastidecor y esas cosas.
Hoy os voy a enseñar uno de los cuadros de mi madre, aunque tiene muchísimos... el problema es que los tiene repartidos (ya os imagináis regalos a familiares, amigos...) y claro, me encantaría enseñároslos todos, pero no veo la manera de poder hacerles fotos.
De momento os enseño este precioso amanecer, y en los siguientes días intentaré hacer fotos a todos los que pueda. Este cuadro tengo la suerte de tenerlo en mi casa, justo encima de mi cama... y poder levantarme todos los días, viendo este maravilloso sol.
Si hay algo común en todos sus cuadros son la alegría que trasmiten. Gracias mamá por trasmitirme este arte!!! y por tantas cosas más, mucho más importantes!!
Te quiero!
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